jueves, 20 de noviembre de 2014

UNA SEXTA PALABRA ROMPE LA SERIE. Gianni Rodari, Por: Nelida Vengoechea

UNA SEXTA PALABRA ROMPE LA SERIE
Gianni Rodari en su libro Gramática de a Fantasía, Introducción al arte de inventar historias, nos sumerge en un sinnúmero de posibilidades para trabajar con los niños la gramática y la literatura  a través de la fantasía y rompiendo con los esquemas tradicionales de enseñanza.  Por medio de este libro podemos hacer un recorrido sobre diferentes estrategias que parten de la imaginación de un niño y de accidentes gramaticales, cambios de palabras y enlaces extraños.
Para mi actividad yo escogí un ejercicio que se llama una sexta palabra rompe la seria. Este ejercicio consiste en construir una cadena de cinco palabras que sean fundamentales para la narración de una historia y posteriormente incluir una sexta que no tenga nada que ver con la historia tradicional  la cual rompe la serie establecida.
El cuento escogido para este ejercicio es Los Tres Cerditos.
Serie de palabras: cerditos, lobo, ladrillos, paja, madera.
Palabra Diferente: moto.
CUENTO LOS CERDITOS EN MOTO

Había una vez tres cerditos que vivían juntos con su mama en una granja.
Un día ellos  decidieron construir sus propias casas y mudarse solos. El  hermano mayor le sugirió a los otros dos que construyeran la casa de un material resistente porque había un lobo malo que podría atacarlos, pero ellos no escucharon las recomendaciones y uno la construyó de paja y el otro de madera.
Cuando el lobo apareció en el pueblo se dio cuenta enseguida que los cerditos ya no vivían juntos y pensó que así sería más fácil comérselos.
Al llegar a la casa del primer cerdito el lobo le advirtió que le abriera porque si no su casa la iba a derrumbar, el cerdito por supuesto no le abrió, entonces el lobo soplo y soplo y derrumbó la casa, cuando ya iba a ingresar a los escombros escucho el motor de una moto que se encendía y de repente salió el cerdito a toda velocidad.  Al llegar a la casa de su hermano un portón automático se abrió y el cerdito entro con su moto.
El lobo no se daba por vencido y la segunda casa que era de madera no parecía muy segura, entonces el grito soplare, soplare y tu casa derribare; Así lo hizo y derrumbo la casa. Al acercarse para comérselos a ambos escucho un sonido estruendoso de motor y vió salir a dos cerditos en moto que le pasaron por encima.
Los motorizados huyeron a la única casa que les quedaba, la de su  hermano mayor la cual tenía una entrada secreta  para las motos en el piso. El lobo que todavía no se daba por vencido, intento entrar por la chimenea al darse cuenta que esa casa era de cemento y ladrillo y que nunca iba a poder tumbarla por más que soplara.
Subió tan alto como puedo y se metió a la chimenea, los cerditos como habían comprado moto tenían ese espacio destinado para su taller y una olla de aceite caliente con el que iban a arreglar la moto. Cuando el lobo calló a la olla de aceite hirviendo quedó tan pelado como un corderito, tanto así que los habitantes del pueblo lo confundieron y se lo comieron para celebrar la fiesta de su santo.
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.




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